Proyectos

El especialista en instrumentación del Centro de Microscopía, José R. Almodóvar, comenta sobre varios proyectos desarrollados allí: “Aunque este centro pertenece al Departamento de Biología, aquí nos llega de todo.  Recuerdo una vez que nos trajeron unas pinzas quirúrgicas porque se estaban rompiendo a mitad de las operaciones.  Y esto era un enigma para el equipo de médicos pues las pinzas eran de la misma marca y fabricante que siempre se había usado sin problema alguno.  La causa nos fue evidente inmediatamente que las magnificamos en el microscopio de rastreo.  El material del que estaban hechas las pinzas nuevas era mucho más poroso, y por lo tanto más débil, que el original.  Recuerdo también otro proyecto sobre entomología forense que me pareció bien interesante.  En este caso era un estudiante de maestría en biología quien estudiaba la sucesión de larvas de insectos que iban apareciendo a lo largo del tiempo en un cuerpo muerto en descomposición.  Este tipo de información sería  útil para análisis criminológicos que necesitaran determinar cuánto tiempo había pasado desde la muerte de la víctima». 

Almodóvar reseña con entusiasmo numerosos proyectos, tan variados como fascinantes, incluyendo algunos sobre hongos y bacterias patógenas; algas marinas muy primitivas, llamadas cocolitoforos, que existen desde millones de años antes que los dinosaurios; partículas extraordinariamente pequeñas, conocidas como nanopartículas, con aplicaciones potenciales en tratamientos contra el cáncer; y añade “incluso en una ocasión nos trajeron piezas de un carro que había estado envuelto en un accidente para determinar, mediante un análisis detallado de las fracturas, si el accidente era resultado de defectos en la construcción de las piezas o si se rompieron por aplicación de una fuerza excesiva.  Este tipo de análisis a veces se requiere en casos que van a corte”.

Estos son algunos de los proyectos que se han apoyado en el Centro de Microscopía durante los pasados años: